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Los desayunos sin prisas me encantan, creo que me alimentan hasta el doble. Me levanto un poco antes que todos los demás y les preparo un desayuno sorpresa, cada día una cosa, y se levantan emocionados viendo qué les depara encima de la mesa.
Esta semana les ha tocado unas tortitas (además de unas galletas) y son estas que hoy comparto con vosotros. Casi no me da tiempo a hacerles las fotos de las ganas que tenían de probarlas.
Las he llamado tortitas Shake Nocilla porque he utilizado este producto que entra en la caja Disfrutabox de este mes. Uno de los dos botes que entraban lo he utilizado en la receta y el otro nos lo hemos bebido muy fresquito y nos ha encantado, de una manera y de otra.
Te animo, e invito, a preparar estas tortitas porque están demasiado ricas. Son esponjosas, no muy dulces y nada difíciles de preparar.
Las puedes comer solas, con sirope, con nata, con fruta, con mermelada, con queso fresco o cremoso de untar… dan mucho juego y admiten muchas posibilidades.
Ingredientes:
– 1 huevo.
– 30 g de panela.
– 30 g de mantequilla derretida.
– 200 g de Shake Nocilla.
– 120 g de harina.
– 12 g de levadura química.
– Una pizca de sal.
Preparación:
Batir bien el huevo con la panela. Añadir la mantequilla y mezclar. Incorporar shake nocilla y batir. Agregar la harina, la levadura y la sal (todas ellas tamizadas). Mezclar bien. Engrasar con un poco de aceite o de mantequilla una sarten y poner al fuego. Cuando esté bien caliente verter una cucharada grande y dejar que se vaya haciendo, cuando empiecen a salir burbujitas será cuando esté hecha por un lado, dar la vuelta y tener como 1 minuto más.