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Estoy reconsiderando, y de una manera seria, el ser un peligro cuando tengo entre mis manos chocolate y nubes (léase la tarta de chocolate y nubes, muffins de chocolate y nubes y bombones rellenos de nubes). Hoy la mezcla de ambos es, otro dulce maravilloso con estos dos ingredientes estrella, de los cuales no pienso cansarme nunca jamás, una mousse super sencilla de preparar, hiper cremosa e ideal para los niños (¡ojo! para los adultos es un pecado, es empezar con un vasito y querer morir por otro según acabas con el primero); además se prepara hasta con los ojos cerrados. Los niños quedaran encantados ya que lleva dos delicias a las que nunca renuncian y que antepondrían a muchísimos otros. Demosles un pequeño capricho con unos cuantos vasitos rellenos de esta delicada mousse.
La receta proviene del último libro publicado en español de Nigella Lawson “Cómida rápida saludable“. Sigo practicando y haciendo recetas de este fantástico libro (esta es la tercera tras preparar los volcanes de chocolate y la crumble crujiente de moras y frutos secos) y no me canso de admirar sus recetas, fotografía y delicadeza en todo lo que hace.
Aquí podéis disfrutar del video de Nigella y ver así el paso a paso.
Aquí podéis disfrutar del video de Nigella y ver así el paso a paso.
Ingredientes:
– 150 grms de nubes (yo le puse las de color rosa).
– 50 grms de mantequilla a temperatura ambiente.
– 250 grms de chocolate con más de un 70% de cacao.
– 60 ml de agua hirviendo.
– 280 grms de nata para montar (con más de un 35% en materia grasa).
– 1 cucharadita de extracto de vainilla.
Preparación:
Pondremos las nubes, la mantequilla, el chocolate (troceado) y el agua en un cazo que tenga la base gruesa. Pondremos el cazo a fuego muy suave para que se vaya derritiendo su contenido muy lentamente (no queremos que el chocolate se nos queme ¿no?). Removeremos de vez en cuando. Una vez derretido dejaremos que enfríe. Yo lo tuve como 20 minutos a temperatura ambiente y lo pasé a un cuendo de cristal para que no conservara tanto el calor del cazo. Mientras tanto, batiremos la nata, junto con el extracto de vainilla, hasta que la tengamos bien firme y la reservaremos. Uniremos ambas mezclas. Para ello cogeremos una pequeña porción de la nata montada e iremos mezclando con el chocolate de manera envolvente y así procederemos hasta acabar con toda la nata hasta que consigamos una mezcla uniforme de color y textura. Verteremos en los vasitos o copas donde lo vayamos a servir. Reservaremos en la nevera hasta su consumo.
Con esta receta voy a participar en un concurso muy interesante, por lo menos para mi, y que me gusta especialmente. Está organizado por el blog Pan y Peter y consiste en publicar la receta (la que tu quieras) que no sea muy complicada de elaborar. El premio me resulta precioso, un amigurumi y la ilustración de tu receta ¿no es fantástico? Para mi es todo un regalazo, me chiflan las ilustraciones y dibujos.