Tras una vuelta de vacaciones en Gran Canaria, donde os tengo muchas cosas que contar pero eso será más adelante; no podía pasar por alto el curso de decoración de galletas que hice en casa de Bea. Todo un lujo tanto el curso, como los materiales, los conocimientos y la profesora. Me siento afortunada en poder haber acudido a una clase bien dada y organizada. ¡Qué agusto estuve en tu casa Bea! No solo nos transmitió sus conocimientos sino que estuvo atenta y pendiente de nosotras en todo momento. Y ese “break” a mitad de mañana… me dió la vida. Solo puedo contar lindezas y maravillas de ese día. No quiero explayarme más en palabras sino en fotos, para que veis todo lo que hicimos con nuestras manitas.
Algunas de las galletas que hicimos (extremadamente concentradas cuando teníamos la manga entre las manos ¿verdad Bea?):
¿No os parecen preciosas? Si os parecen bonitas están el triple de ricas (ya no me queda ninguna galleta en casa, me las he comido toditas todas…)
Y el empaquetado. Si, si Bea nos enseño como empaquetar y como hacer que la galleta luzca más bonita si cabe, un detalle precioso:
Aquí nos tenéis a todas las que acudimos el primer día del curso de galletas decoradas el 7 de noviembre. Salió todo perfecto, a pedir de boca. Bea te pongo un 10 (siendo objetiva y porque no hay más numeración del 1 al 10) y un 20 como persona (aquí te sales de los parámetros), eres encantadora. Mil gracias por tu amabilidad, comprensión y dedicación. Ahora queda pendiente el practicar en casa (he de confesar que ya me he hecho con parte de los útiles para hacer las galletitas, espero que me salgan y no tener que llamarte desesperada…)