Este es un dulce que recomiendo a todo el mundo, incluso a la gente a la que no le gusta el café. El frosting que lleva por encima este bizcocho, pese a ser de café, al combinar este con la mantequilla y el azúcar lo convierten en un tofee delicioso. Un bocado exquisito que viene de la mano de Ana y de su blog más dulce Corazón de almíbar.
Ingredientes:
Para el pastel o bizcocho:
– 2 y 1/2 cucharaditas de café instantáneo disuelto en una cucharada de agua caliente.
– 170 grms de mantequilla a temperatura ambiente.
– 140 grms de harina.
– 1/2 sobre de levadura (unos 8 grms).
– 140 grms de azúcar.
– 3 huevos.
– 80 grms de nueces.
– Una pizca de sal.
Para el glaseado o frosting:
– 2 cucharadas de leche.
– 2 cucharaditas de café instantáneo.
– 95 grms De mantequilla a temperatura ambiente.
– 125 grms de azúcar glass.
Preparación:
Precalentaremos el horno a 180º y prepararemos un molde cuadrado untándolo con mantequilla y harina, para evitar que el bizcocho se nos pegue. Batiremos la mantequilla con el café disuelto y el azúcar hasta que la mezcla blanquee y esté cremosa. Añadiremos los huevos, de uno en uno, sin dejar de batir. Tamizaremos la harina, la levadura y la sal y se la incorporaremos. Añadiremos las nueces troceadas. Extenderemos la mezcla en el molde y hornearemos unos 30 minutos. Una vez frío lo cortaremos en porciones cuadradas de 3 ó 4 cm.
Para preparar la cobertura o frosting, calentaremos la leche y disolvemos el café. Dejaremos entibiar la mezcla y agregaremos la mantequilla cortada en trocitos. Es el momento de añadir el azúcar glassy removeremos enérgicamente hasta que tengamos una crema suave y esponjosa. Extenderemos la crema por la superficie de los pastelitos ayudándonos de una espátula.