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Tres ingredientes, si me apuras dos, te pueden llevar a la felicidad. Como lo lees. Puedes prescindir del aceite aunque yo lo echo para que se derrita mejor el chocolate.
Y no solo es que lleve estos pocos ingredientes si no que en menos de 5 minutos la tendrás lista ¿no es algo fantástico?
¿Cómo podría yo describirte el resultado de esta receta? La mezcla de los ingredientes es maravillosa. El chocolate al llevar trocitos de galleta hace que cada mordisco tenga toques crujientes y con un sabor fantástico (me ha recordado mucho a sabores de mi infancia). Y la frambuesa le aporta el toque fresco (muy muy refrescante) y un puntito de acidez muy agradable.
También puedes añadirle un poco de sal en escamas que ya le dará un punto extra muy interesante. Yo no se lo añadí porque lo hice para las niñas y no sabía si les iba a gustar con la sal.
Ingredientes:
– 1/2 cucharadita de aceite de girasol.
– Un puñado de frambuesas frescas.
Preparación:
Derretir el chocolate con el aceite en el microondas en tandas de 30 segundos. Una vez derretido verter sobre papel de horno y extender hasta que se forme una capa de unos 3 milímetros de grosor. Dejar caer las frambuesas. Enfriar hasta que endurezca.